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AUTOPSIA CLÍNICA EN URGENCIAS: REVISIÓN DE CASOS DE LOS ÚLTIMOS 16 AÑOS Y GRADOS DE DISCREPANCIA DIAGNÓSTICA CLÍNICO-ANATOMOPATOLÓGICA

Autor/es
Guereñu Panero, Isabel; Colinas Reyero, Daniel; González González, Diego; Callejo Pérez, Patricia; Torres Nieto, Mª Ángeles.
HOSPITAL UNIVERSITARIO RÍO HORTEGA
isaguerenu@hotmail.com
Orden de Presentacion
253
Fecha de Presentacion
Viernes, 16 de febrero. Sesión de mañana
Pantalla
1

Introducción

Llamamos autopsia clínica a toda aquella que se lleva a cabo en muertes naturales, no violentas ni sospechosas de criminalidad. Sin embargo, existen situaciones en las que estas muertes naturales pueden presentarse como sospechosas, como es el caso de un fallecimiento sin asistencia sanitaria o muertes en el curso de un proceso patológico de evolución atípica. De esta manera, sería necesario llevar a cabo una necropsia en los siguientes supuestos: estudio clínico completo que no haya bastado para definir la causa de la muerte; estudio clínico incompleto que haga sospechar otras lesiones no demostradas e interés científico. Una vez concluimos nuestro diagnóstico final, es interesante como marcador de calidad asistencial, establecer una correlación entre los diagnósticos clínicos y anatomopatológicos y así ponderar las discrepancias entre ambos. Una forma sencilla y ágil es utilizar los criterios de Goldman et al., donde se establecen unas discrepancias mayores (Clases I y II) y menores (Clases III y IV) en base a la comparación entre ambos diagnósticos, siendo la máxima discrepancia la de clase I, aquella que afecta al diagnóstico principal y cuyo diagnóstico correcto hubiera supuesto una prolongación de la vida del paciente; Clase II, que afecta al diagnóstico principal pero un diagnóstico correcto no hubiese prolongado la vida del paciente; Clase III, discrepancias en diagnósticos secundarios no relacionado con la causa de muerte; Clase IV, discrepancias en diagnósticos menores ocultos no diagnosticables y clase V, diagnósticos iguales, no discrepantes.

Materiales y métodos

Revisamos los informes anatomopatológicos finales de las autopsias clínicas de adulto realizadas en el Servicio de Anatomía Patológica del Hospital Universitario Río Hortega de Valladolid entre los años 2000 y 2016, procedentes de pacientes cuya estancia hospitalaria hasta su fallecimiento fue menor a 24 horas. Se compararon con los diagnósticos clínicos aportados en la hoja de petición de autopsia, aplicando los Criterios de Goldman et al. descritos previamente y estableciendo las clases de discrepancia para cada una de ellas.

Resultados

De las 604 autopsias realizadas en nuestro Servicio entre los años 2000 y 2016, sólo 11 de ellas (2%) pertenecían a pacientes fallecidos en un periodo inferior a 24 horas desde su llegada al Servicio de Urgencias. Se ha establecido el grado de discrepancia en cada una entre ambos diagnósticos con los siguientes resultados: Discrepancia clase I en 2 de ellas (18%); Clase II en 2 (18%;) Clase III en 3 (27%); Clase IV en 2 (18%); y Clase V en 2 (18%). Englobadas por categorías, las discrepancias mayores (clase 1 y 2) corresponderían al 36% y las discrepancias menores (clase III, IV y V) al 64%.

Conclusiones

La autopsia clínica es una herramienta muy útil como marcador de calidad asistencial en los Centros Hospitalarios. En nuestro estudio, referido a sobre todo a las autopsias procedentes del Servicio de Urgencias, aunque existe un porcentaje de discrepancias mayores relacionadas con la causa de muerte (clase I y II) del 36%, consideramos que al tratarse de un periodo menor de 24 horas de ingreso del paciente en el hospital, justificaría la discordancia y a la vez la petición de estudio autópsico en estos pacientes. Sin embargo, las discrepancias menores (clases III, IV y V) constituyen la mayoría en nuestros casos de esta serie (73%),que se traduce en una buena coincidencia diagnóstica no coincidiendo únicamente en diagnósticos secundarios no relacionados con la causa de la muerte. La realización de sesiones conjuntas clínico-patológicas multidisciplinares continúan siendo aconsejables para la mejora de este parámetro de calidad y evitar los casos de discrepancias mayores, no sólo en los pacientes procedentes del servicio de Urgencias como es este estudio.