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PÓLIPO JUVENIL INTESTINAL AISLADO: ¿LESIÓN PREMALIGNA?

Autor/es
Mª Asunción Arrechea Irigoyen, Mercedes Santamaría Martínez, Miren Vicuña Arregui, Alicia Córdoba Iturriagagoitia, Mª Luisa Gómez Dorronsoro, JM Martínez-Peñuela Vírseda
Hospital de Navarra
mirenar@mixmail.com
Orden de Presentacion
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INTRODUCCIÓN: Los pólipos juveniles intestinales fueron descritos por primera vez por Horrileno y col. en 1957 y se consideran pólipos hamartomatosos que aparecen bien de forma aislada o formando parte de síndromes familiares. Son los pólipos más frecuentes en la infancia y constituyen más del 90% de los pólipos observados en niños. Generalmente aparecen en la infancia y rara vez en la adolescencia. CASO CLÍNICO: Mujer de 22 años con rectorragias, sin alteración del tránsito intestinal. La rectosigmoidoscopia y colonoscopia reveló un pólipo pediculado en sigma que se extirpó con asa de polipectomía. Microscópicamente, el pólipo remitido mostraba abundante estroma fibroso infiltrado por linfoplasmocitos y eosinófilos con abundante vascularización. Contenía formaciones glandulares, generalmente revestidas por epitelio mucosecretor sin atipia. En periferia del pólipo se apreciaban erosiones en superficie con fibrina y polimorfonucleares y múltiples focos de crecimiento epitelial glandular, irregular, focalmente cribiforme con seriación nuclear, hipercromasia y atipia núcleocitoplasmatica moderada. Se observaban frecuentes mitosis en estas zonas. Corresponde a un pólipo juvenil con áreas de pólipo adenomatoso y focos múltiples de displasia epitelial grave. COMENTARIO Los pólipos juveniles del intestino grueso son los pólipos gastrointestinales más frecuentes en la infancia y de forma tradicional se han considerado lesiones benignas hamartomatosas. Sin embargo, estudios recientes han mostrado una mayor incidencia de displasia y de carcinomas colónicos en la poliposis juvenil, lo cual ha llevado a considerarlo realmente un proceso premaligno. La relación entre pólipos juveniles aislados y malignidad es menos clara. Recientemente se ha descrito que los pólipos juveniles aislados pueden sufrir también cambios adenomatosos y malignos. Algunos estudios han mostrado la presencia de displasia hasta en un 40% de los pólipos juveniles aislados. Por ello, algunos autores consideran que el tratamiento tradicional conservador de los pólipos juveniles aislados debería ser reconsiderado, muy especialmente en aquellos que presentan displasia e historia familiar de malignidad.